La cistitis es el término médico que se usa para denominar la inflamación de la vejiga. La mayoría de las veces esto es provocado por una infección urinaria causado por la presencia de bacterias. Esto puede desencadenar en un problema grave de salud si se disemina a los riñones.

Hay otras veces (con menos frecuencia) que puede deberse a una reacción a determinados medicamentos o a los aerosoles de higiene femenina.

¿Cuáles son los síntomas?

  • Dolor y escozor
  • necesidad constante de orinar
  • Sangre en la orina (en algunos casos)
  • orina turbia y con olor fuerte
  • Dolores pélvicos
  • sensación de presión en la parte inferior del abdomen
  • Fiebre baja (en algunos casos)

Tipos de Cistitis:

  1. Cistitis aguda (bacteriana)

Se da con la aparición de bacterias, la más frecuente es la Escherichia coli, un tipo de microorganismo que habita en los intestinos. Estas bacterias entran en contacto con la vejiga a través de la uretra y pueden llegar a provocar la cistitis bacteriana de la que hablamos. Cabe destacar que es más frecuente en mujeres que en hombres.

  1. Cistitis intersticial

Se caracteriza por ser una infección crónica que produce dolor en la vejiga y, en algunas ocasiones, también en la pelvis. La vejiga es el músculo encargado de almacenar la orina. Esta se expande hasta llenarse y es entonces cuando se comunica con el cerebro, gracias a los nervios de la pelvis, para que vayamos al baño a orinar.

El problema de quienes padecen este tipo de cistitis es que esta comunicación no se realiza correctamente por lo que provoca que estas personas tengan la necesidad de orinar con mucha frecuencia y con poca cantidad de orina.

¿Es contagiosa?

No es una enfermedad altamente contagiosa, pero cabe recalcar que la práctica de relaciones sexuales incremente el riesgo de sufrir infecciones en las vías urinarias tales como la cistitis.

¿Cómo se diagnostica?

Con una muestra urinaria es suficiente para saber si la cantidad de bacterias presentes son significativas, además de si se presentan los síntomas que hemos comentado anteriormente

¿Cómo se trata?

El tratamiento son los antibióticos. El médico te indicará cuáles son los indicados para tu tipo de infección y la duración del mismo.